Por Liza Collado
Las alianzas público privadas o APP aportan sostenibilidad a la prestación de los servicios públicos básicos, el agua, saneamiento, energía, transporte, salud, educación, en sociedades como la nuestra requieren de un esfuerzo conjunto entre las empresas, la sociedad civil y los municipios. En la oferta electoral de los diversos partidos políticos de cara a las próximas elecciones municipales hemos visto muy pocos planes de gestión que aporten esa visión integral.
Contemplar la #GestiónPública apostando a la ejecución de obras de infraestructura modernas, sostenibles, es ayudar a través de estas inversiones a la reducción de la pobreza. Cuando las APP son diseñadas correctamente y su desarrollo se realiza en entornos regulatorios equilibrados se convierten en una alternativa multisectorial al tiempo de planificar proyectos en los municipios, porque estos promueven el desarrollo a nivel local.
Según revelan las cifras del Banco Mundial los números actualmente son negativos. Alrededor de 1,060 millones de personas en todo el mundo viven sin electricidad; 4,500 millones sin acceso al saneamiento gestionado en condiciones de seguridad y 2,100 no tienen acceso al suministro de agua potable. La República Dominicana no escapa a esta realidad, la falta de cogestión es un obstáculo para el crecimiento y el comercio en nuestras provincias.
Se necesitan grandes esfuerzos para que los proyectos sean atractivos a los inversionistas, elaborados en marcos innovadores que propicien la movilización de grandes inversiones. La base de datos de esta entidad indica que para el 2016 el total de inversiones se redujo a USD71, 000 millones en comparación con lo promediado en el período 2011-2015 que fue de USD121, 000 millones.
Desde la experiencia dominicana se ha logrado avanzar algunos pasos, el Sistema de Monitoreo de la Administración Pública Municipal concebido como una oportunidad para mejorar nuestros municipios, promueve el cumplimiento de la leyes con indicadores de desempeño y transparencia en el uso del #PresupuestoPúblico , la calidad del gasto, las compras e inversiones públicas entre otros aspectos.
En la más reciente evaluación del SISMAP se destacan en las primeras posiciones los ayuntamientos de Bánica, Santiago de los Caballeros, Villa Jaragua, Villa Tapia y Bani. La interrogante sería, si la eficiencia que se mide se puede traducir en bienestar para sus comunidades y hasta qué punto impactan los resultados de este ranking.
El 16 de febrero próximo se espera tener nuevos intendentes antes las Alcaldías, al margen de las simpatías o los colores partidarios debe priorizarse el bienestar colectivo. Los munícipes en un ejercicio de conciencia ciudadana debemos exigir a quienes buscan nuestra representación en las distintas demarcaciones el debate de estos temas, sus propuestas para levantar los antecedentes e implementar experiencias pilotos que logren un impacto positivo. Es determinante sumar esfuerzos para otorgar centralidad al munícipe, que es el usuario/beneficiario de estas políticas y acuerdos.