Dos policías locales en un puesto de control en un municipio en cuarentena en la zona roja de Lombardía, el pasado 25 de febrero.VIRGINIA HEBRERO / EFE

LORENA PACHO

El Gobierno prevé prohibir las entradas y salidas en Lombardía y otras 11 provincias, entre ellas Venecia, y planea contrataciones masivas de personal sanitario

El borrador, que considera medidas tan restrictivas como la prohibición de entrar o salir de toda la región de Lombardía y el resto de provincias y los desplazamientos por estos territorios, salvo previa autorización por motivos laborales ineludibles o de urgencia, se publicó en los medios locales el sábado por la tarde y durante algunas horas generó gran confusión, ya que no hubo ningún tipo de comentario, confirmación ni mensaje por parte del Ejecutivo. En algunas ciudades, como Milán, según publicaron los medios locales, cientos de personas se dirigieron de inmediato a las estaciones ferroviarias para tratar de coger un tren que los llevara fuera de la región, temiendo quedar atrapados.

Para evitar la incertidumbre, las regiones de Lombardía y de Emilia Romaña pidieron durante la noche aclaraciones al Gobierno sobre el alcance de las normas, ya que el borrador no precisaba detalles importantes sobre cómo afectarán las medidas a los medios de transporte o cómo se llevarán a la práctica las limitaciones. Attilio Fontana y Stefano Bonaccinique, gobernadores de Lombardía y Emilia Romaña respectivamente, avalaron en un primer momento la necesidad de implantar restricciones similares a las planteadas por el Gobierno, pero pidieron más tiempo al primer ministro, Giuseppe Conte, para trabajar en una norma clara y detallada que aborde todas las cuestiones para que los ciudadanos tengan claro qué podrán hacer y qué no cuando entre en vigor el decreto.

Hasta ahora, estaban en aislamiento 10 localidades de Lombardía y una de Véneto, en las que viven 50.000 habitantes. También están cerrados todos los colegios y universidades del país. En el texto del Gobierno también se recomienda “firmemente” a quienes muestren síntomas de afección respiratoria o fiebre (con más de 37,5º) que no salgan de casa y limiten al máximo todos los contactos sociales. El aislamiento, según el texto, se mantendría como mínimo hasta el 3 de abril.

Entre otras medidas, como se lee en el borrador publicado por el diario La Repubblica, el Gobierno también baraja el cierre de los museos y centros culturales de las nuevas zonas de aislamiento, y la suspensión de las manifestaciones o eventos públicos que conlleven aglomeraciones de personas. Los eventos deportivos previsiblemente quedarán suspendidos también, aunque en algunos casos, las autoridades podrán otorgar un salvoconducto para que algunos partidos se jueguen a puerta cerrada. En cambio, la intención del Ejecutivo es permitir que los bares, restaurantes y negocios abran, siempre y cuando puedan garantizar que hay espacio suficiente para que las personas mantengan un mínimo de un metro de distancia entre ellas, para evitar el contagio. Los fines de semana deberán cerrar los centros comerciales.

En Lombardía, los hospitales están en una situación límite por la epidemia. La inmensa mayoría de los enfermos graves están concentrados también en esta zona. En los dos últimos días, más de 100 pacientes han tenido que ser trasladados a cuidados intensivos. Las asociaciones de trabajadores de estas unidades especiales lanzaron ayer un llamamiento dramático: “Trabajamos con gran esfuerzo para atender a los pacientes graves y muy graves, cuyas vidas dependen de un número limitado de equipos tecnológicamente complejos. Es absolutamente necesaria la adopción inmediata de medidas drásticas destinadas a reducir los contactos sociales y útiles para contener la epidemia”. Y concluyeron: “En ausencia de disposiciones oportunas y adecuadas, nos veremos obligados a enfrentar un evento que solo podemos calificar como un desastre sanitario”.

El Gobierno también está trabajando contra el reloj para reforzar la sanidad pública. Ha aprobado un nuevo decreto ley que contiene otras medidas de emergencia como contrataciones masivas de personal sanitario: 20.000 en total, entre médicos, enfermeros y auxiliares, según medios locales. Además, el Gobierno da vía libre a reclutar especialistas y otros profesionales de la salud, sin concurso público, lo que permitiría incorporar a voluntarios, sanitarios jubilados o a médicos residentes.

El equipo de Giuseppe Conte también ha aprobado ampliar los puestos en cuidados intensivos y en los departamentos de Neumología y Enfermedades Infecciosas, para poder hacer frente al creciente número de personas con coronavirus que requieren hospitalización. Además, limitará la actividad de la Justicia hasta el 31 de mayo y aplazará todas las vistas menos urgentes.

El coronavirus ha llegado también hasta la primera línea de la política. Nicola Zingaretti, el líder del Partido Demócrata, que gobierna en coalición con el Movimiento 5 Estrellas, y es también presidente de la región de Lacio, de la que Roma es la capital, está infectado por el virus y se encuentra en aislamiento domiciliario.

Fuente: El País