(AFP).- El primer ministro italiano, Giuseppe Conte, pidió un plan de reconstrucción económica «valiente» para salir de la crisis, ante el «impacto sin precedentes» que ha implicado la pandemia del coronavirus para el país.
«Estamos viviendo una conmoción sin precedentes, que trae costos humanos, sociales y económicos muy elevados», declaró Conte, al abrir una conferencia en la que participaron, por video, dirigentes europeos, funcionarios de gobierno y de otros sectores, pero con la ausencia de la oposición de derecha, que boicoteó el encuentro.
«Comparto la misma concepción con la presidente de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen: no podemos permitirnos regresar al statu quo anterior a esta crisis», dijo.
El país tendrá que especificar «un proyecto valiente» y «transformar la crisis en oportunidad para eliminar todos los obstáculos que frenaron (al país) durante los últimos veinte años», señaló.
Estos debates buscan trazar las grandes líneas de un plan económico que será presentado en septiembre a la Comisión Europea.
Para estimular la economía de los países europeos más afectados por el nuevo coronavirus, la Comisión propuso a fines de mayo un plan de recuperación de 750.000 millones de euros (840.000 millones de dólares).
De ese total, 500.000 millones de euros (560.000 millones de dólares) serán subvenciones no reembolsables y 250.000 millones (280.000 millones de dólares) préstamos.
Italia se beneficiaría de 172.000 millones de euros (194.000 millones de dólares). Para lograrlo, tiene que presentar un proyecto muy detallado.
– «El sacrificio de Italia» –
Una modernización del país pasará por una administración pública eficaz y mejor informatizada, una economía menos contaminante, así como una reducción de las desigualdades y la pobreza, subrayó el primer ministro.
Conte habló el sábado en un palacio del siglo XVII, Casino del Bel Respiro, situado en el inmenso parque romano villa Doria Pamphilj, un «homenaje a la belleza italiana» que debe también ser incluida en las futuras inversiones, según el jefe del gobierno.
El presidente del Consejo Europeo, el belga Charles Michel, quien habló desde Bruselas, rindió homenaje a Italia, primera afectada en Europa por el nuevo coronavirus.
«No hay que olvidar esto: el sacrificio de Italia salvó probablemente vidas en el resto de Europa», indicó Michel, destacando «el ejemplo de la disciplina, la resistencia y la valentía que hicieron posible detener la propagación de la epidemia.
Von der Leyen felicitó al gobierno por los primeros esbozos del plan estratégico de reformas.
Por su parte, la presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, aconsejó «no desperdiciar esta crisis», y preconizó antes que todo instaurar un ambiente económico favorable a las empresas.
Italia, afectada brutalmente por el covid-19 con más de 34.000 muertos y que fue el epicentro de la enfermedad en la UE, experimentará según las previsiones una baja del PIB de entre 8,3% y 14% en 2020.