El ejército israelí volvió a bombardear el viernes por la mañana objetivos de Hamas en la Franja de Gaza tras disparos de cohetes y globos incendiarios desde el enclave palestino hacia el sur de Israel, que fue en parte cerrado por las fuerzas de seguridad.
La aviación israelí bombardeó Gaza poco después de medianoche y luego en la mañana del viernes, en respuesta –según indicó– al disparo de siete cohetes desde Gaza, de los cuales seis fueron interceptados por el escudo antimisiles Iron Dome.
Según testigos en Gaza, enclave controlado por el movimiento islamista Hamas, los cohetes fueron lanzados hacia la localidad israelí de Sderot, situada al norte de la frontera con Gaza. Debido a esos disparos, las autoridades israelíes restringieron el acceso a localidades como Sderot.
Un cohete atravesó el techo de una casa, sin causar víctimas, según un fotógrafo de la AFP. La policía israelí bloqueaba asimismo el acceso a la playa de Zikim, situada al norte de la Franja de Gaza.
El Hamas «no dudará en librar batalla al enemigo si prosiguen la escalada, los bombardeos y el bloqueo» declaró en un comunicado Fawzi Barhum, portavoz del movimiento islamista que controla Gaza desde 2007.
El ministro israelí de Defensa, Benny Gantz, había acusado por su lado esta semana a Hamas de «jugar con fuego» y advertido que Israel iba replicar a cualquier ataque «a su soberanía».
– Fallida mediación –
Israel ha bombardeado la Franja de Gaza casi todas las noches desde el 6 de agosto en respuesta al lanzamiento de globos incendiarios, o incluso disparos de cohetes. Asimismo, ha reforzado su bloqueo a Gaza, en vigor desde hace más de una década, prohibiendo a los pescadores gazatíes salir al mar y cerrando el único paso de mercancías entre el enclave e Israel.
Estos disparos se producen tras la visita a Gaza e Israel de una delegación de Egipto, país árabe fronterizo con este territorio palestino que firmó la paz con el Estado hebreo en 1979. Egipto actuó de intermediario el año pasado, junto a la ONU y a Catar, para firmar una tregua entre los dos bandos.
Pero, pese a esta tregua, que prevé planes de desarrollo y una ayuda financiera mensual de unos 30 millones de dólares pagados por el emirato de Catar a Gaza, se producen enfrentamientos esporádicos entre Hamas e Israel.
Según fuentes coincidentes, en los últimos meses se han lanzado cohetes y globos incendiarios a Israel para intentar obligarlo a que permita el tránsito de este dinero y tratar de levantar el bloqueo.
Según una fuente afín a Hamas, este movimiento desea una «extensión de la zona industrial al este de Gaza», la construcción de una nueva línea eléctrica hacia el enclave y duplicar –hasta 10.000– el número de obreros gazatíes que pueden pasar la frontera para trabajar en Israel, una vez levantadas las medidas anticovid.
Desde 2008 Gaza ha sido escenario de tres sangrientas guerras entre Israel y los movimientos armados palestinos. En el enclave palestino viven más de dos millones de personas, la mayoría de ellas refugiadas y casi el 80% depende de la ayuda humanitaria, según cifras de la UNRWA, la agencia de la ONU para los refugiados palestinos.
Fuente: Agencia Francesa de Prensa