El lanzador dominicano Ramón Rossó manifestó que dio un paso importante al llegar a las Grandes Ligas en esta temporada del 2020 con los Phillies de Philadelphia, siendo el dominicano no. 785 de por vida que arriba a la Gran Carpa.
«Fue un paso importante en mi carrera haber llegado a las Grandes Ligas, ya que me vi fuera de béisbol por 3 años, y gracias a Dios los Phillies me firmaron y confiaron en mi trabajo», dijo el lanzador.
En una conferencia de prensa virtual por la plataforma Zoom con los periodistas, convocada por el departamento de prensa de las Águilas Cibaeñas, Rossó, quien es parte del staff de lanzadores de dicho equipo, habló también sobre la influencia de sus compañeros de los Phillies, como es el caso del patrullero derecho Bryce Harper, su compatriota Jean Segura, el receptor J.T. Realmuto, entre otros jugadores, calificando esa experiencia como grata en su carrera como pelotero.
Cabe destacar que el dominicano firmó a los 19 años de edad por un bono de US$62,000 dólares en julio del 2015 con los Dodgers de Los Ángeles, quienes lo reclutaron desde el CB Barcelona, un equipo de la División de Honor de Béisbol de España, de donde nació su padre, pero luego fue dado de baja un año después.
Sin embargo, en el 2017, firma con los Phillies de Philadelphia, quienes anteriormente le habían ofrecido un bono de US$30,000, y los resultados de dicha firma no se hicieron esperar; en 3 temporadas en los circuitos minoritarios de los Phillies, Rossó tuvo foja de 23 triunfos y 10 reveses, 2.80 de efectividad, 360 ponches y un WHIP de 1.14 en 322 entradas lanzadas, lo que le valió que fuera subido al equipo grande, haciendo su debút el pasado 24 de julio del año en curso.
En esta ocasión busca ganarse un puesto en la rotación abridora con las Águilas Cibaeñas, quienes lo seleccionaron en el draft de novatos de la LIDOM en el 2018 como pick de 5ta ronda.
Será interesante ver lo que trae este joven lanzador para el conjunto cibaeño en una temporada atípica en el béisbol invernal dominicano, ya que estará marcada por estrictos protocolos de bioseguridad y salud para los jugadores a los fines de no ser expuestos al contagio de la pandemia del COVID-19, y que lamentablemente no contará con la presencia de fanáticos en los estadios del país que quieran darle seguimiento a este jugador, aunque podrán hacerlo desde sus hogares.