PRENSA INTERNACIONAL.- El “Congreso de la Nación Cubana”, una iniciativa que se puso en marcha en la isla de Cuba ante la falta de representación de los ciudadanos en las instancias de poder bajo el control del régimen castrista desde hace 61 años, fue presentado el miércoles por líderes del exilio cubano en Miami.
El nuevo Congreso se originó como respuesta de la sociedad civil cubana que no tuvo el espacio requerido para exponer sus denuncias y aportes durante el Octavo Congreso del Partido Comunista de Cuba, realizado en la tercera semana de abril.
Asimismo, es el primer paso del denominado Plan de Rescate de la República de Cuba, una propuesta de los cubanos de adentro y fuera de la isla que se lanzó el pasado 20 de mayo, con motivo del 119 aniversario de la Independencia de la nación insular.
El “Congreso de la Nación Cubana” inició labores con 63 reuniones en 12 provincias, entre el 13 y el 25 de mayo. Las reuniones se llevaron a cabo en las provincias de La Habana, Pinar del Río, Artemisa, Camagüey, Matanzas, Mayabeque, Ciego de Ávila, Las Tunas, Holguín, Guantánamo, Santiago y Cienfuegos.
“Este es un primer paso dentro del plan que se llevará a cabo hasta que conmemoremos el 120 aniversario de la República de Cuba, en 2022, y ha servido para confirmar el grado de compromiso que tienen los cubanos de adentro y fuera de la isla por la libertad de nuestra nación”, comentó Orlando Gutiérrez-Boronat, directivo de la Asamblea de la Resistencia Cubana.
Entre los temas que se abordaron durante los encuentros del Congreso resaltan la necesidad de organizar al pueblo para la lucha por la libertad, lograr una mayor conciencia democrática, ratificar el Acuerdo por la Democracia de 1998, la unidad de los cubanos dentro y fuera de la isla, trabajar por las necesidades urgentes de la población y la recuperación de la historia nacional.
Bertha Antúnez, activista cubana por los derechos humanos, explicó que “fueron reuniones que se hicieron sin alertar al régimen, para evitar más represión, en donde se dijo lo que no pudieron decir los cubanos en el Congreso del Partido Comunista, en el que, a su vez, no se reflejaron los verdaderos problemas del pueblo”.
Entretanto, Gutiérrez-Boronat aseguró que los próximos pasos consistirán en la creación de “comisiones conjuntas para la transición hacia la libertad”, que trabajarán de manera articulada entre activistas cubanos en la isla y otros del exilio para afianzar las funciones del “Congreso de la Nación Cubana”.