Por: Yaniris López

Santo Domingo (D.N.), República Dominicana.-La alerta la lanzaron los protectores de animales el pasado martes: la falta de atención a los animales callejeros ha provocado el aumento de enfermedades transmitidas por pulgas y garrapatas, al punto de considerar que existe una “pandemia” en la población de perros y gatos.

“Tenemos una ‘pandemia’ de garrapatas, la erliquia está acabando con todos nuestros animalitos”, advierten.

Ante el problema, llaman al Ministerio de Salud Pública a tomar en cuenta la situación tal y como lo dispone la Ley 248-12 sobre Protección Animal y Tenencia Responsable.

“Tenemos la Ley desde 2012 y la Ley designa a Salud Pública como el ente rector del tema porque los animales son un tema de sanidad. Si usted tiene animales expeliendo bacterias en la calle y los tocan los niños, aunque no sean mortales, usted está enfermando a alguien”, sostiene la presidenta de la Federación Dominicana por los Derechos de los Animales (FEDDA), la comunicadora Lorenny Solano.

Riesgo de Zoonosis

Nancy García de Blanck, de la Fundación de Blanck, explica que cuando la garrapata pica al animal le transmite los huevitos de organismos protozoos como la babesia (que ataca los glóbulos rojos) y la erliquia y anaplasma (que infectan los glóbulos blancos), generando infecciones que en ocasiones derivan en enfermedades graves y fatales.

Las pulgas, a su vez, llevan dentro los huevitos de un parásito tipo tenia que se les pega a las personas, indica.

“Este, cuando pica no lo transmite; pero el perro, cuando se lame porque le molesta la picadura se traga la pulga y todo eclosiona en el intestino; cuando hace sus necesidades en cualquier lugar, a los niños que andan descalzos les entra por las uñitas o por los piecitos”.

Como estas afecciones producen síntomas muy parecidos a los de la gripe, son enfermedades silenciosas que al extenderse ponen en riesgo la salud de la población (zoonosis).

La sarna y el papiloma canino también están haciendo estragos entre los animales, señalan.

Las esterilizaciones no bastan

Las castraciones y esterilizaciones reducen las enfermedades en los animales pero ahí también hay un tema, apunta Nancy.

“Si esterilizas un animalito enfermo y lo tiras a la calle a sobrevivir, para mí eso es maltrato. Si no le hiciste un hemograma, no sabes si tiene anemia o alguna enfermedad. Y si hay animalitos que no tienen posibilidad, por lo menos dale una muerte digna, no lo tires a la calle”.

Aquí radica la importancia de contar con una veterinaria pública, que no existe, consideran los representantes de las entidades que velan por el bienestar animal.

Si existiera una veterinaria pública, sigue Nancy, las personas de pocos recursos o de recursos medios tendrían la posibilidad de acceder a atenciones médicas para sus animales.

“Estamos hablando de que la operación de intestino a un perro que se tragó una piedra cuesta 51 mil pesos, o que una tomografía ronda entre 17 y 31 pesos”, afirman los animalistas.

Y dicen que no podrían costear los casos que reciben sin el apoyo de veterinarios amigos que se solidarizan con la causa.

“En un momento tuve 21 perros internos en 5 clínicas, es algo desesperante”, comenta Darío Andújar, de la fundación Albergue S.O.S.

De la necesidad de albergues

Once años después de promulgada la Ley 248-12, la población sigue esperando la construcción de casas albergues en las provincias y en el Distrito Nacional, como ordena el artículo 12.

Muchas organizaciones sin fines de lucro están dispuestas a habilitar un refugio si contaran con espacios para hacerlo, dice Pilar de la Cruz, de Rescate Nefertitis, quien en un mes ha rescatado hasta 28 perros.

“Si tienes 200 fundaciones y 15 están en la disposición de tener albergues, y tenerlos sin cobrar salarios, déjame mandarles un veterinario, mandarles alimentos”, sugiere Solano que deberían hacer las autoridades.

O podrían pagar a los empleados de estos espacios a través de Salud Pública o de las alcaldías, agrega Darío Andújar.

Tanto Ivette García de Blanck como Pilar aseguran que llevan años solicitando terrenos con estos fines al Consejo Estatal del Azúcar (CEA).

Hospital público

Lorenny Solano expone que desde la Fundación Laso presentaron un proyecto modelo de hogar (no de refugio o albergue) que se llamará ‘Hogar de Animales Ciudad de Ángeles”. Para ello hicieron ya el levantamiento de unos terrenos y los solicitaron en arrendamiento al CEA.

“Estamos en ese proceso. Ahí pretendemos crear el primer hospital veterinario público, no porque vaya a ser del Estado, sino porque queremos tener costos simbólicos y un espacio donde las fundaciones puedan mandar a sus animalitos”.

Entiende que es una labor titánica para los protectores de animales conseguir medicamentos y alimentos y por tanto hace falta empujar al Estado a que cumpla su rol.

“Nosotros estamos haciéndole un trabajo al Estado que no tiene precio, tiene valor pero no precio. Lo que pedimos es que no nos dejen solos con el trabajo que te toca a ti, que encima lo hacemos con amor, porque eso es otra cosa, nadie te puede hacer un trabajo mejor que el que está enamorado de este trabajo”, dice Lorenny.

Fuente: Listín Diario