Las aulas estuvieron vacías por más de año. (FUENTE EXTERNA)
Omar Santana

Informe de la Unesco indica una relación entre tiempo para retorno a clases y la deserción.

Santo Domingo (D.N.), República Dominicana.- Durante la pandemia hubo medidas acertadas y desacertadas. Todo apunta a que pasará a la historia como una medida desacertada de dimensiones catastróficas el intencional retraso de la vuelta a las aulas, a nivel escolar y universitario.

El informe de la «Unesco: Tecnología en la Educación» para el año 2023 indica que hay una relación en que «cuanto más dure el cierre de las escuelas primarias, más probable es que aumenten las tasas de no escolarización».

En el caso dominicano el informe indica que en el año 2022 la escolarización de la primera infancia descendió en alrededor de un 25 % con relación al año 2020.

Situación local

En la República Dominicana el «retorno gradual» a las aulas públicas ocurrió el 6 de abril de 2021, tras más de un año de encierro y a solo dos meses y medio del final del año escolar. El retorno gradual significó que en la educación pública iniciaron con 2,000 centros y tan solo en los 38 municipios donde el COVID-19 tenía menor incidencia.

Una encuesta realizada por Educa para febrero de 2021 revelaba que el 51.04 % de los padres creía que sus hijos aprendieron menos con las clases a distancia, que antes de la pandemia, y un 4.66 % pensaba que no aprendían nada.

Los efectos

El país se encontró entre las naciones que pospusieron el retorno a clases por más de 30 semanas. En este aspecto, destaca que algunos países pospusieron hasta por 70 semanas el retorno a las aulas, como fue el caso de Filipinas, sin embargo, el efecto de la deserción escolar fue mucho menor e inclusive a nivel de primaria hubo un incremento de la escolarización respecto a los niveles prepandemia. Sin embargo, la República Dominicana estuvo entre las naciones con un mayor porcentaje de deserción escolar a todos los niveles: primaria, alrededor de un 6 %, y  secundaria por encima de un 10 %.

República Dominicana se encuentra entre los países con datos, donde las tasas de participación se redujeron a nivel general un veinte por ciento, entre los que  también están Nepal, Filipinas, Albania, Omán y Uruguay, lo que muestra que, en muchos casos, la deserción escolar no estuvo vinculada al nivel de ingresos.

Las pantallas

Junto a los datos de la pandemia, la Unesco aconsejó el martes a los gobiernos a reevaluar la presencia de las tecnologías digitales en las aulas, como los teléfonos móviles y las tabletas los cuales señala como potenciales entorpecedores del proceso educativo en los estudiantes.

«El uso de tecnología en las aulas y en el hogar por parte del alumnado puede provocar distracciones y, por consiguiente, entorpecer el aprendizaje. Un metaanálisis de estudios sobre el uso de teléfonos móviles por parte de estudiantes y su impacto en los resultados educativos, que abarcaba alumnado desde preprimaria hasta educación superior de catorce países, mostró un pequeño efecto negativo y otro mayor a nivel universitario… Los estudios sugieren una relación negativa entre el uso de las tecnologías digitales».

Dos años sin universidades

No fue hasta el 16 de febrero de 2022 que el Ministerio de Educación Superior Ciencia y Tecnología (Mescyt) levantó restricciones para el retorno a las aulas de forma presencial, luego de que los padres de universitarios expresaran preocupación por «el poco interés demostrado por las universidades por la calidad del profesional formado».

Fuente: diariolibre.com.do