Al menos 13 personas murieron y unas 100 resultaron heridas este jueves en un «atropello masivo» en Las Ramblas de Barcelona llevado a cabo por una persona con una furgoneta.
Los Mossos d’Esquadra, la policía catalana, calificaron lo sucedido de «atentado terrorista» e informaron que dos personas fueron detenidas.
El ataque -que fue reivindicado por el autodenominado Estado Islámico- sucedió alrededor de las 17:00 hora local (15:00 GMT).
El conductor de la furgoneta todavía no ha sido detenido.
La furgoneta entró en la calzada central al inicio de Las Ramblas, en la confluencia con Plaza de Catalunya, atropellando a los peatones y recorriendo 600 metros antes de estrellarse contra un puesto de venta de periódicos.
Según testigos, el conductor salió del automóvil y huyó del lugar a pie.
Entre los 100 heridos, 15 se encuentran en estado grave.El gobierno de Bélgica confirmó que uno de los fallecidos es uno de sus nacionales.
La policía española hizo pública la imagen de uno de los sospechosos del atentado, identificado como Driss Oukabir, que podría estar vinculado con el alquiler de la furgoneta utilizada en el ataque.
Medios locales dicen que los documentos de Oukabirpudieron ser utilizados para alquilar la furgoneta y que él negó estar implicado lo ocurrido.
Según las autoridades catalanas, uno de los detenidos proviene de Melilla, el enclave español en el norte de África, y el otro es de nacionalidad marroquí.
Las estaciones de metro y tren cercanas al lugar del ataque fueron cerradas, igual que los locales comerciales, donde se resguardaron centenares de personas.
Según la prensa local, se encontró en la localidad de Vic, cercana a Barcelona, una segunda furgoneta que tendría relación con lo ocurrido este jueves.
Reunión de emergencia
Imágenes posteriores al ataque mostraban a varias personas tendidas en el pavimento del icónico paseo.
Además, trascendieron videos en los que se veía a agentes de policía armados recorriendo las calles aledañas a Las Ramblas en busca de sospechosos.
Las autoridades de seguridad del gobierno de Cataluña realizaron una reunión de emergencia en la que también participaron funcionarios del gobierno español.
«Los catalanes hemos sido, somos y seremos gente de paz y de acogida y no permitiremos que un ataque como este cambie eso», dijo en una comparecencia de prensa el presidente de la Generalitat de Catalunya (gobierno regional), Carles Puigdemont.
«La democracia doblegará el terrorismo y la barbarie allá donde se produzca. Anteriormente nos solidarizamos con las otras ciudades donde ocurrieron estos ataques y hoy serán estas ciudades las que se solidaricen con nosotros», dijo Puigdemont.
Mientras, la alcaldesa de la Barcelona, Ada Colau, visiblemente afectada, dio las gracias por las muestras de solidaridad recibidas.
«Barcelona es y ha estado siempre una ciudad de paz, abierta al mundo y orgullosa de su diversidad y lo seguirá siendo», aseguró Colau.
Solidaridad internacional
Por su parte, el presidente español, Mariano Rajoy, contactó con los líderes de los principales partidos políticos para mantenerles informados del desarrollo de los acontecimientos.
El mandatario decretó tres días de duelo y calificó a lo sucedido en Las Ramblas como un «ataque yihadista«.
Líderes internacionales mostraron su repudio a lo ocurrido este jueves.
«Estados Unidos condena el ataque terrorista en Barcelona, España, y haremos lo que sea necesario para ayudar. ¡Sed duros y fuertes, os queremos!», escribió el presidente de EE.UU., Donald Trump, en su cuenta de Twitter.
El expresidente de EE.UU., Barack Obama, también expresó sus condolencias a las víctimas del atentado: «Los estadounidenses siempre apoyaremos a nuestros amigos españoles».
Desde Francia, el presidente Emmanuel Macron subrayó la solidaridad de su país con las víctimas del «trágico ataque en Barcelona» e insistió en la importancia de mantenerse «unidos y decididos» contra el terrorismo.
El presidente mexicano Enrique Peña Nieto expresó que su país «condena enérgicamente el atentado que tuvo lugar en #Barcelona».
«Mi solidaridad con el pueblo y gobierno de España», escribió en Twitter.
Mientras, el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, deploró el «cobarde ataque» y recordó que su país se opone «a cualquier forma de violencia».
«Todo el mundo empezó a correr y gritar»
Un testigo de lo sucedido que trabaja en la zona dijo a la BBC que desde su oficina vio cómo la camioneta embistió a la gente.
«Vi a tres o cuatro personas tumbadas en el suelo. Ahora hay muchas ambulancias y policías armados con fusiles de asalto».
Otro testigo, Aamer Anwar, explicó que Las Ramblas estaban repletas de turistas en la tarde de este jueves.
«De repente he oído un choque y todo el mundo empezó a correr y a gritar», le explicó a la cadena británica Sky News.
«La policía ha sido muy rápida en aparecer, había agentes con armas por todas partes», relató.
En el último año varios vehículos fueron utilizados para embestir a multitudes en una serie de ataques en otras partes de Europa que dejaron decenas de fallecidos.
Las autoridades en Barcelona estaban en estado de alerta desde los atentados de París de 2015, incrementando la presencia de fuerzas de seguridad armadas en áreas céntricas de la ciudad.
Desde ese año se han producido en Cataluña decenas de detenciones de sospechosos de colaborar con el extremismo yihadista.
España sufrió en 2004 el peor ataque terrorista en suelo europeo de la historia reciente cuando varias bombas estallaron en trenes en Madrid, causando la muerte de 192 personas.