La reacción natural de la población pobre en condiciones de tener menos dinero en sus manos que antes, será la de culpar a quienes son los responsables de poner el dinero a circular en la economía y ante el señalamiento, en la construcción del imaginario social sobre el análisis forense del hecho, llega a la conclusión de que el victimario es la autoridad pública y la víctima, el ciudadano, razón suficientemente poderosa para que su reacción conductual se volque contra quien le ha generado tener escasez de dinero en un entorno de incremento de precios.
Afirma un escrito del Banco Central que las condiciones monetarias se tornan más favorables en la actualidad, al incrementarse los niveles de liquidez de la economía dominicana, contribuyendo de esa manera a una mayor expansión de los agregados monetarios, luego de culminar el ciclo restrictivo en materia monetaria, como manera de contrarrestar los altos niveles de inflación que han padecido los consumidores.
La publicación no dice que antes de entrar a la política monetaria restrictiva, las autoridades que conducen la política económica propiciaron una fuerte expansión monetaria, acompañada de un extraordinario gasto público, que promovió mayores niveles de déficit fiscal, ambos, en adición al tema internacional, son las razones que explican el origen de la inflación dominicana, que lleva casi cuatro años consecutivos -desde el 2020 hasta septiembre de 2023- sin cumplir con la meta de inflación del 4.0 %.
Como fundamento de lo afirmado, encontramos que el déficit fiscal de 2020 alcanzó un 7.5 % del PIB, el más elevado, al menos en las últimas décadas, promovido por un fuerte aumento del gasto público de un 30.7 %, al pasar de RD$ 744,267.1 millones a RD$ 973,062 millones, respecto al año 2019, un incremento sin igual en el manejo de la ejecución presupuestaria y, por el lado monetario, hasta finales de 2020, el Banco Central había dispuesto para proveer de liquidez a la economía, la colocación de recursos rápido por medio a la banca, por valor de RD$ 190,814 millones. Ahí la génesis de la inflación dominicana y la otra parte del ciclo monetario, en la modalidad expansiva, previo a la contractiva cuando se comenzó a elevar la tasa de interés monetaria.
El Banco Central ofrece explicaciones sobre la forma más correcta de calcular los niveles de movimiento de los agregados monetarios y de la base monetaria, indicando como la valida, el cálculo interanual; pero resulta, que, en la construcción de la narrativa, siempre tratan de acomodarla a la que le sea más amigable al objetivo planteado, de manera que no resulta axiomático, sino que cuando le es útil, hacen referencia al método intermensual y cuando no, al interanual.