Con 22 años se acaba de graduar en el MIT con la nota más brillante jamás otorgada por el centro y está considerada una de las mentes más brillantes de Estados Unidos.

El MIT compara su inteligencia con la de Einstein, con la creatividad de Da Vinci y el esfuerzo de Stephen Hawking. 

De hecho, grandes empresas como La Nasa, Amazon o la multinacional aeroespacial Blue Origin se pelean para ofrecerle un trabajo.

En lo personal, Sabrina no quiere un smartphone, ni una cuenta en Twitter o Instagram, tampoco ha subido su currículum a Linkedin, y a su cuenta de Facebook accede en pocas ocasiones. Pero sí cuenta con su página web, Physicsgirl donde actualiza regularmente los proyectos en los que trabaja. Además, Paterski tiene un grupo pequeño de amigos y afirma que se niega a beber ni fumar porque, “prefiero ser conocida por lo hago y no porque lo que dejo de hacer”.

“Si trabajas todo es posible”

De madre cubana y de padre estadounidense creció en una pequeña casa a las afueras de Chicago donde comenzó su pasión por la ingeniería espacial. Se pasaba horas en el garaje de su padre construyendo maquetas de aviones y arreglando motocicletas.

 Sabrina explica que siempre ha sabido a lo que se iba a dedicar desde pequeña. “Cuando me subí por primera vez en un avión sabía lo que me iba a dedicar el resto de mi vida, me sentía libre”.

Su objetivo profesional es poder mandar una nave al espacio construida por ella misma, su sueño es llevar a alguien a Marte. “Se que suena imposible, pero si trabajas todo puede ser posible”, afirma Pasterski.

El “proyecto a Marte” como lo denomina, lo empezó en el colegio con la ayuda de su profesor de matemáticas, Micah Fogel, quien afirma en una entrevista para el Diario de Chicago que nunca ha tenido una alumna como Sabrina. “Se presentó con 14 años a un concurso de maquetas y me quedé asombrado, sin embargo trajo el avión que había construido con 9 años, así que la pregunte, ‘esto está muy bien, ¿pero que has hecho últimamente?’”.

A Sabrina este comentario no le gustó, sin embargo asegura en el Diario que desde ese momento fue su eslogan de motivación.“Siempre estoy pensando, ¿qué he hecho últimamente?, siempre intento tener un objetivo a seguir”.

“nadie nace sabiendo, pedir ayuda es la mejor forma de lograr tus objetivos”

Pasterski siempre ha mantenido los pies en el suelo, “siempre he necesitado ayuda de mis profesores para mis construcciones,nadie nace sabiendo, pedir ayuda es la mejor forma de lograr tus objetivos”, responde la joven.

Sobre el reconocimiento que está teniendo actualmente afirma que le abruma un poco. “Es bueno tener reconocimiento exterior, pero espero que algo más grande salga de mi trabajo a parte de reconocimiento, siento que tengo muchas creaciones en mi mente y tengo que desarrollarlas”.

Su inteligencia ha llegado hasta la Nasa

Cuando se graduó del colegio aplicó solamente al Instituto Tecnológico de Machachussets (MIT) y la pusieron en lista de espera. Pasterski asegura que la espera fue muy dura porque no tenía plan B porque sabía que quería estudiar allí. “Me esforcé en creer en mí y en trabajar duro para conseguir mi objetivo”.

Aunque no estaba en la lista de admisiones, dos profesores del MIT, Allen Haggerty y Earll Murman vieron un vídeo de Pasterski construyendo un avión y quedaron tan impresionados que hicieron todo lo posible para que fuera aceptada.

Al terminar la universidad decidió hacer el doctorado en Harvard sobre los agujeros negros, la naturaleza de la gravedad y la relación espacio-tiempo. Particularmente se ha centrado en entender mejor el fenómeno de la ‘gravedad cuántica’.

El doctorado de Sabrina ha llamado la atención de la NASA quien le ha propuesto trabajo una vez que termine la investigación.

Además, el fundador de Amazon, Jeff Bezos, le ofreció trabajo para cuando quisiera. Hace poco ella le escribió a través de la web OZY preguntando si la oferta sigue en pie y Bezos sólo respondió “¡Dios, sí!”.

Referencia: Actual.com