El español Pablo Ibar fue hallado culpable este sábado en Estados Unidos de un triple asesinato cometido en 1994, en el tercer juicio por este caso después de que la justicia de Florida le revocara una condena a muerte previa.
«El jurado halló culpable a Pablo de todos los cargos, estamos muy decepcionados con el veredicto y apelaremos», dijo a la AFP su abogado, Benjamin Waxman, tras la lectura del veredicto en un tribunal de Fort Lauderdale, al norte de Miami.
El portavoz de la Asociación contra la Pena de Muerte Pablo Ibar, Andrés Krakenberger, escribió a periodistas: «Seguiremos batallando. Esto no acaba aquí. Para nada».
El juicio, que comenzó el 1 de octubre del año pasado frente al juez Dennis Bailey, es el tercero que se le persigue a este vasco de 46 años que ha pasado más de la mitad de su vida en prisión y defendiendo su inocencia.
Ibar había sido sentenciado a muerte en el año 2000 por los asesinatos en 1994 del dueño de un club nocturno y dos bailarinas que estaban con éste en su casa en Miramar, Florida, durante un robo. Un juicio anterior había sido anulado.
Hace dos años, luego de que Ibar había pasado 16 años esperando su ejecución en el corredor de la muerte, el Tribunal Supremo de Florida revocó este segundo proceso que lo había hallado culpable y ordenó enjuiciarlo de nuevo.
La prueba clave para el proceso del año 2000 fue un video en blanco y negro y de mala calidad, en el que una persona señalada como Ibar dispara en la cabeza al hombre y a las dos mujeres.
El Tribunal Supremo de Florida falló en 2016 que Ibar había tenido una defensa «ineficaz» y que las pruebas en su contra habían sido «escasas» y «débiles».
Ahora, en este tercer juicio, la defensa intentó demostrar que la mala calidad del video y la poca fiabilidad de las pruebas de ADN -cuyo tratamiento era menos sofisticado en los años 1990 que en los tiempos actuales- no eran suficientes para condenarlo.
No obstante, los 12 miembros del jurado decidieron el veredicto por unanimidad. El 25 de febrero el tribunal se reunirá de nuevo para decidir la condena, que podría ser pena de muerte o cadena perpetua.
«Esto no me lo esperaba», dijo su padre, Cándido Ibar, a periodistas en el tribunal.
El 27 de junio de 1994, dos personas entraron a una casa en Miramar (cerca de Fort Lauderdale) y asesinaron a Casimir Sucharski, dueño del club nocturno Casey’s Nickelodeon, y a las bailarinas Sharon Anderson y Marie Rogers.
El 25 de agosto de 1994, Pablo Ibar y Seth Peñalver fueron acusados de triple homicidio.
El primer juicio tuvo lugar en 1997, pero fue anulado porque el jurado no coincidió en un veredicto. Tras una serie de rifirrafes judiciales, el segundo juicio a Ibar comenzó en el año 2000 y acabó en su condena a muerte.
Entretanto Peñalver también había sido condenado a muerte, pero en la repetición de su juicio en 2012 fue absuelto y salió en libertad –un hecho que la defensa tenía prohibido mencionar a los jurados en este tercer juicio a Ibar.
«Entiendo que tenemos bastantes bazas de apelación», dijo Krakenberger.
Una es «la extralimitación del fiscal al final del juicio, calificando a Pablo de asesino», mientras la segunda fue la decisión del juez «de que el jurado no tuviera noticia de la absolución de Seth Peñalver en el mismo caso».
En sus alegatos finales, la fiscalía repasó las pruebas ya existentes contra Ibar y descalificó a la defensa citando el proverbio francés «cuanto más cambian las cosas, más permanecen iguales».
De su lado, los abogados defensores insistieron que los métodos de identificación fotográfica eran débiles, demostraron que la evidencia estaba contaminada y que la mayor parte del ADN de una camiseta hallada en el lugar del crimen correspondía a otro hombre que no era Ibar, entre otras pruebas forenses cuestionadas.
Durante el juicio, el ex detective Paul Manzella -autor de la investigación del caso en 1994- admitió que no había seguido otras pistas en torno al caso. En particular, dijo haber ignorado una pista que lo orientaba hacia la mafiosa familia Gambino, según un recuento del portavoz Krakenberger.
El periodista español Nacho Carretero presentó en diciembre en la ciudad vasca de Vitoria-Gasteiz el libro «En el corredor de la muerte», una crónica novelada del caso Ibar.
Fuente: Afp.com