Tras nuestra solicitud de opinión, @VeniceComm presenta su informe final sobre la reelección: La reelección no es un DDHH, e impedir la reelección no limita los derechos de los candidatos o los votantes @OEA_oficial. https://t.co/iQuGiTfz1O pic.twitter.com/6Z8o7swzH4
— Luis Almagro (@Almagro_OEA2015) April 9, 2018
SANTO DOMINGO. El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, informó que de acuerdo a una solicitud que hizo a la Comisión Europea para la Democracia a través del Derecho, conocida como la Comisión de Venecia, sobre la reelección esta concluyó que “La reelección presidencial no es un derecho humano e impedir la reelección no limita los derechos de los candidatos o de los votantes”, informe que según la OEA “tiene validez política” por lo que ha solicitado que sea “distribuido a los Estados Miembros, con la esperanza de que se convierta en información esencial en la larga discusión sobre la reelección en las Américas.”
Añade que hizo esta solicitud debido a que en América Latina existe “la mala y reiterada práctica regional de modificar la Constitución durante un mandato para buscar la reelección o la posible perpetuación en el poder en sistemas presidenciales. En algunos casos, peores aún, se buscó sin cambio constitucional hacerlo mediante sentencias judiciales”.
Almagro sostiene que “El reporte de la Comisión no es una opinión política. Es un documento con plena validez jurídica. Por ello, he solicitado que este documento sea distribuido a los Estados Miembros, con la esperanza de que se convierta en información esencial en la larga discusión sobre la reelección en las Américas.
El 28 de octubre de 2017 solicité a la Comisión Europea para la Democracia a través del Derecho, conocida como la Comisión de Venecia, un estudio sobre la reelección. Recientemente, la Comisión emitió su informe final, que es inequívoco: La reelección presidencial no es un derecho humano e impedir la reelección no limita los derechos de los candidatos o de los votantes.
El informe confirma el criterio planteado por las Misiones de Observación Electoral de la OEA.
Por ello, enviaré este documento para conocimiento y análisis de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, la Corte Interamericana y el Comité Jurídico Interamericano.
Iniciamos este proceso por la mala y reiterada práctica regional de modificar la Constitución durante un mandato para buscar la reelección o la posible perpetuación en el poder en sistemas presidenciales. En algunos casos, peores aún, se buscó sin cambio constitucional hacerlo mediante sentencias judiciales.
En respuesta a nuestra solicitud, la Comisión aprobó un informe redactado por un grupo diverso de reconocidos expertos independientes en materia constitucional y electoral de Corea del Sur, España, Estados Unidos, Finlandia, Francia y México.
El informe contiene un análisis jurídico exhaustivo, y llega a la conclusión de que el derecho a la reelección no es un derecho humano en sí, sino que deriva del derecho a la participación política y no se vulnera con la imposición de límites de mandatos.
Estos límites buscan evitar la perpetuación en el poder y que la democracia se convierta en una dictadura de facto.
Esa restricción -continúa el informe- proviene de una decisión soberana del pueblo plasmada en la parte orgánica de su Constitución, y no en el capítulo de los derechos fundamentales.
En consecuencia, nadie puede argumentar tener derecho a postularse a una reelección después de un mandato si la Constitución establece lo contrario.
Para la Comisión de Venecia, la decisión de alterar o remover los límites a los mandatos presidenciales debe estar sujeta al escrutinio público, dado que tiene un impacto significativo en el sistema político, en la estabilidad del país y en la confianza sobre el sistema electoral. Y, en todo caso, para modificarse, requiere una reforma constitucional.
Por último, pero no menos importante: la Comisión concluyó que eliminar los límites a la re-elección presidencial es un paso atrás en la consolidación democrática.
El reporte de la Comisión no es una opinión política. Es un documento con plena validez jurídica. Por ello, he solicitado que este documento sea distribuido a los Estados Miembros, con la esperanza de que se convierta en información esencial en la larga discusión sobre la reelección en las Américas.