Comprés estableció que sobre los prisioneros pesan medidas de coerción y la mayoría tiene varios meses en la cárcel preventiva sin haber sido trasladados al Centro de Corrección y Rehabilitación (CCR) correspondiente.

Ante eso, pidió que se construyan más módulos en el CCR de La Isleta, en Moca, y se cree un centro correccional para mujeres.

Agregó que la penitenciaría cuenta con suficientes terrenos para levantar esas edificaciones.

LO MATARON A GOLPES

El pasado diciembre, Darío Antonio González, de 53 años, fue trasladado a La Carcelita tras supuestamente haber intentado abusar sexualmente de su madre.

Según sus familiares, mientras Darío González estuvo detenido recibió una golpiza y fue penetrado con un palo, lo que le provocó graves heridas internas que le provocaron un paro cardíaco mientras estaba hospitalizado, y donde finalmente falleció.

RELATO DE MUERTE

Estefany Carolina Paulino, hija mayor de Darío, contó a Listín Diario que fue a la cárcel del cuartel de Moca a visitarlo y solo le permitieron ver a su padre en presencia del “probó” de la cárcel, quien estaba controlando su comportamiento y comentarios, para que Darío no dijera nada de los maltratos que había recibido, según explicó.

Cuando la víctima fue trasladada al hospital, su hija se aseguró para que el policía no fuera tras ellos y entonces preguntó a su padre que le habían hecho, a lo que este respondió que “los policías mandaron a los presos a golpearlo e introducirle un palo por su ano”.

UN HECHO ATERRADOR

Explicó que una sonografía a su padre determinó que tenía todos los intestinos revueltos y un gran hematoma en la vejiga.

Mientras se encontraba en el hospital, la azúcar y la presión, en conjunto con los golpes y desgarres, terminaron en un paro cardíaco que acabó con la vida de Darío.

Sin embargo, en el diagnostico emitido por el medico de turno en la emergencia del Hospital Provincial Doctor Toribio Bencosme, sobre la evaluación a la señora de 75 años, de la que presumía habría sido abusada sexualmente por Darío, dicta que “no se encontraron datos patológicos con relación al acto”.

EL PROBLEMA PERSISTE

En enero de 2023, el juez de la Primera Sala de la Corte de Apelación Penal del Distrito Nacional dijo que el uso frecuente de la prisión preventiva ha provocado una sobrepoblación carcelaria y ha desbordado la carga laboral en los tribunales.

Igualmente, en enero, pero de 2022, se informó que el número de reclusos se ha ido incrementando en las cárceles dominicanas. De 26,978 personas en prisión en diciembre de 2020, la cifra se elevó a 27,146 con un incremento de 246 reos.

Un informe de 2022, hasta esa fecha, los reos preventivos constituyen el 59 por ciento, con un total de 15,509, de los que el 41 por ciento está condenado, para un total de 10,952. La prisión preventiva fue la principal medida de coerción en los juzgados de instrucción en 2020 y 2021, con 19,514, equivalente al 43.41 por ciento de las 44,946 medidas cautelares impuestas durante esos años.

Fuente: listindiario.com.do